Hay un gran variedad de aplicaciones de mensajería instantánea, pero sin duda Whatsapp se ha impuesto, siendo la aplicación que más usuarios tiene actualmente.
El éxito de Whatsapp en mi opinión es debido a que ha reemplazado a los SMSs de manera inmediata, eliminando el coste de los tradicionales mensajes cortos. La ventaja es evidente, podemos enviar un mensaje sin coste a cualquier persona de la cual tengamos su número de teléfono con el único requisito de que necesita tener instalada también la aplicación.
Esta sencillez para contactar con la gente y crear grupos sin necesidad de ningún proceso de aceptación previo es lo que le ha llevado a extenderse rápidamente. Antes que Whatsapp se popularizó Blackberry messenger, lo que le dio a la compañía canadiense RIM el liderazgo entre los clientes más jóvenes con sus terminales Blackberry. Blackberry messenger es un sistema de mensajería más seguro, pero durante mucho tiempo sólo se podía usar en los dispositivos de RIM, con lo que Whatsapp le comió el mercado enseguida.
Sin embargo, Whatsapp, por mucho que se haya extendido, no garantiza la privacidad de los usuarios. A todos nos ha molestado alguna vez que nos hayan incluido en un grupo en el que hay gente que no son nuestros contactos, pero que tienen acceso a nuestro número de teléfono. La sencillez de uso que le ha llevado a extenderse es lo que podría acabar con ella si los usuarios llegaran a ser más celosos de su privacidad. Blackberry messenger se abrió a otras plataformas, está disponible para android, pero no es un rival serio para Whatsapp.
Por otro lado, WeChat sí que podría poner en peligro a Whatsapp. En China WeChat está muy extendido, y en nuestro país las campañas publicitarias han logrado que mucha gente lo conozca y un porcentaje no despreciable se lo instale. Vamos a intentar comparar ambos y ver si respondemos a nuestro dilema: WeChat o Whatsapp ¿cuál es mejor?
Para mi lo mejor de Whatsapp es que le podemos mandar un mensaje a alguien sin necesidad de contactar con esa persona antes. Si tiene instalada la aplicación, le mandas un mensaje y ya está. Como el que manda un SMS. Ante eso no hay mejora posible.
En contrapartida, yo personalmente, recomendaría a mis hijos usar otra aplicación en la que sí fuera necesario aceptar la invitación de alguien a chatear o a unirte a un grupo. En Whatsapp se acaba creando una red social, grupos, en los que no todos son nuestros conocidos, y en los que no podemos controlar quién nos añade al grupo, o a quién le dan nuestro número. La pérdida de privacidad es importante. Los ajustes de privacidad de Whatsapp son escasos e insuficientes. Por suerte podemos bloquear usuarios. También podemos ocultar nuestra foto de perfil, o la hora de la última conexión, lo que nos da un cierto grado de privacidad.
WeChat funciona de un modo diferente, puedes instalar la aplicación usando el mismo número de teléfono en más de un smartphone, pero sólo podrás iniciar sesión en uno de ellos a la vez.
Para contactar con alguien en WeChat puedes configurar si quieres que sea necesario un primer contacto en el que se solicita tu confirmación de amistad y puedes configurar si quieres que te encuentren o no por tu número de teléfono. Estos dos ajustes de privacidad garantizan un cierto nivel de protección, que pensando en los menores puede ser muy interesante. En WeChat también se pueden bloquear usuarios, lo que es muy importante puesto que como veremos a continuación WeChat tiene otras funcionalidades que tienen un punto de peligrosidad.
Me ha llamado mucho la atención el carácter de red social o red de contactos que tiene WeChat, formalizado por dos funcionalidades muy novedosas, pero un tanto inseguras. Esas funcionalidades son “Sacudir” y “Personas cercanas”. Si agitas tu smartphone la aplicación detecta otros usuarios que están haciendo exactamente lo mismo en ese instante con sus móviles, y te pueden enviar un saludo, a partir del cual comenzaríais a chatear. Y si buscas personas cercanas te ofrece un listado con fotografías de perfil de personas en tu área geográfica, lo cual puede ser más peligroso todavía. Si tienen sus perfiles abiertos y han publicado fotos cualquiera puede verlas. Estas dos opciones particularmente me dan bastante respeto, por no decir miedo.
Si un menor usa WeChat y publica fotografías abiertamente, cualquiera puede verlas sabiendo que ese adolescente o niño está a 200 metros, 800 metros o 1 km de distancia. Las fotos de nuestro perfil incluso se las pueden guardar en el teléfono otros usuarios de WeChat que desconocemos por completo. De modo que lo que había comenzado siendo una aplicación con ciertas garantías de privacidad, es en realidad un punto de encuentro con desconocidos, potencialmente peligrosos para los menores. Podemos salvar esos inconvenientes seleccionando un foto de perfil que no nos identifique, configurando en nuestro perfil un área geográfica falsa, y no descubriendo nuestro nombre real en el nombre de usuario.
Hace unos días estuvimos probando WeChat en casa, porque me había gustado la función de Walkie Talkie o push to talk. Es muy curioso y divertido para los niños, porque se pueden comunicar con los teléfonos como si fueran walkie talkies, para jugar a espías por ejemplo. También son muy atractivas para los niños las pegatinas o calcomanias. Si tus hijos usan WeChat explícales los riesgos que corren, revisa su privacidad, y ajústala convenientemente para que no estén expuestos a riesgos innecesarios.
Como veis, no ha resultado tan fácil resolver la cuestión WeChat o Whatsapp ¿cuál es mejor? Al final todo tiene sus ventajas y sus inconvenientes, y siempre es importante revisar todas las opciones de la aplicación antes de usarla y acompañar a los menores en esta revisión para comprobar, aconsejar y proteger a los chicos y chicas de los peligros de internet.
Espero que os haya resultado interesante esta nueva entrada.
Gracias por leernos.